LA BAÑEZA - GUÍA DE TURISMO 2019

92 ITINERARIO 2.- LE-125 / LE-420 / CL-622 / N VI HINOJO ARQUITECTURA RELIGIOSA CAPILLA DE SANTA EULALIA, DEHESA DEL MARQUESADO DE ESTEVA DE LAS DELICIAS. En tiempos poseyó un retablo de Nicolás Francés, realizado originalmente para un monasterio franciscano desconocido y trasladado después a esta capilla. Se trata del retablo de la Vida de la Virgen y de San Francisco custodiado actualmente en el Museo del Prado, que constituye uno de los conjuntos más bellos de la pintura europea de mediados del siglo XV y es uno de los mejores ejemplos del excelente patrimonio que atesoran las Tierras Bañezanas en el exilio. Más allá de sus cualidades narrativas y estilísticas, uno de los aspectos más sugerentes de la tabla reside en la recreación del imaginario oriental a través de la figura del sultán y de sus súbditos. SITIOS ARQUEOLÓGICOS PREHISTÓRICOS CASTRO DE HINOJO Poblado de la primera e inicios de la Segunda Edad del Hie- rro bien documentado. El castro de la Dehesa de Hinojo se en- cuentra cerca de Valdesandinas, próximo al cauce del Órbigo. Los restos arqueológicos hallados y el emplazamiento del lugar, hacen pensar en un primer asentamiento de la Edad de Bronce y en una repoblación en la Edad de Hierro, justo antes de las invasiones prerromanas. Se han hallado en él restos de industria achelense, las llama- das hachas escoplos o hachas planas, de la Edad del Cobre y del Calcolítico. También se han hallado restos de una necrópolis celta en la que aparecieron fragmentos de cerámica cocidos a fuego re- ductor, hechos a mano y a torno y con decoración excisa de color negro. El torques de Hinojo, pieza destacable entre las halladas en este castro resulta, no obstante, un singular precedente de la desarrollada orfebrería de los castros o poblados astures de la Segunda Edad del Hierro y vincula a este tipo de orfebrería con la cultura de El Soto de Medinilla, que incluyó una floreciente industria metalúrgica del bronce, también con presencia de objetos de hierro, pero en la que son anómalos los objetos de orfebrería como este. Puede verse, junto a otras piezas apare- cidas en este castro, en el Museo de León. VALDEFUENTES DEL PARAMO ARQUITECTURA POPULAR MOLINOS La ribera del Órbigo reúne una gran cantidad de molinos. La mayoría (los más antiguos construidos en adobe) son de tapial, madera y teja, mientras que los más modernos incor- poran el ladrillo. Algunos disponen de varias plantas y otros solo una. Los más comunes son los dedicados a la molienda de cereales para obtener harina. En otros casos se dedicaban a moler la semilla del lino para obtener aceite de linaza. En algunos se instalaron turbinas accionadas por agua con las que producir energía eléctrica utilizada para el alumbrado público y doméstico de los pueblos. Destaca por sus molinos, entre todas las localidades de la comarca de la vega Órbi- go-Tuerto, el municipio de Valdefuentes. Partiendo del hecho de que la Presa Cerrajera al entrar en el término de Valdefuentes discurre por un valle natural, su apro- vechamiento ha sido realmente considerable. Desde el límite con el campo de Valdesandinas y Villazala hasta Azares, con- vivieron en tiempos no muy lejanos nueve molinos de norte a sur. De todos ellos solo dos, los molinos “Blanco” y “Mariano”, son los que permanecen en pie. Respecto al Molino Blanco, con seguridad se trata del molino más grande y mejor conservado, a pesar del desuso, de toda la provincia de León y aún en condiciones de producir en sus mue- las el aceite de linaza que hizo famoso a Valdefuentes. Llamado Gran adorno circular en bronce procedente del Castro de Hinojo y expuesto en el Museo Arqueológico de León. Fotografía Gemma Cano.

RkJQdWJsaXNoZXIy NTEwODM=